Si, en tus besos, me perdí
aquella tarde de abril.
Esa tarde, donde todo podría
haber sido posible…
y casi lo fue!
El amor llegó a mi
disfrazado de camaleón
me cantó una dulce serenata
y me cautivó el corazón,
robo mi dulce sentir
y luego…
y luego me dejó…
Oh amor,… por qué me elegiste a mí?,
si yo estaba bien con mi vida…
Has irrumpido en la
quietud de mis silencios
y de mi profunda paz.
Y desde entonces
viajo cada día, en carrozas
tiradas por caballos del infierno,
que no tienen la menor idea de a dónde van.
Solo sé, que aprendí, como tú
a disfrazarme y estar en vigilia,
para conseguir mi propia paz.
Pero….
Mi única paz viene de ti
y hacia ti quiero ir, sin
importarme cuanto tiempo
le llevará al infierno
en reclamarme….
Perdón, quise olvidarte
pero no pude…
Perdón, luche por arrancarte
de mi piel,
pero ella solo me recuerda
lo feliz que fui…a tu lado
Azul Strauss Markuart
25/ 03/ 2011
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